Aprender a tocar un instrumento musical puede ser una actividad muy divertida. Si no estás seguro de cuál es el ideal para tí, o para tu hij@, a continuación te daré algunos consejos para que te decidas por uno u otro.
Los más populares (en España, que es el territorio que más conozco en este aspecto) son el la guitarra, el piano, la flauta "dulce" y el violín. No sabría decir si son populares en ese orden, o no... pero no debo andar muy desencaminada (hay zonas de España donde hay más tradición en ciertos instrumentos: por ejemplo, el acordeón es muy popular en regiones del Norte mientras que los instrumentos de viento son muy populares en la zona del Levante).
Como mi especialidad es el piano y el violín, me veo más capaz de hablar de las ventajas y desventajas de cada uno de ellos. Después de leerlo, ¡tú eres el que decide!
Entre las ventajas del piano está que "suena bien siempre" (en realidad, es una forma de decir que siempre está "afinado") y entre las desventajas que es un instrumento grande, que ocupa espacio y que cuesta mucho dinero adquirirlo (aunque siempre hay opciones alternativas como un alquiler con opción a compra, o hacerte con un instrumento de segunda mano; además, también existen los pianos eléctricos y muchos tipos de teclados que, para principiantes, pueden ser suficientemente buenos para iniciarse).
Los pianos que utilizan los estudiantes de niveles bajos suelen afinarse una vez al año y no suelen necesitar más desembolso.
Entre las ventajas del violín (y de los instrumentos de cuerda frotada, en general) es que es de tamaño más reducido (con lo cual, no es necesario tanto espacio y se puede guardar y transportar más fácilmente) y la horquilla de precios en instrumentos para principiantes también es inferior. Pero... ¡un pero bastante importante!, es relativamente "desagradecido" empezar a tocar el violín: hay que sujetarlo de una forma que parece bastante antinatural (la torsión del brazo izquierdo, el cuello y la barbilla...) y el sonido hay que "fabricarlo" (además, es necesario afinarlo con frecuencia y esto un principiante no sabe hacerlo así que durante la semana que pasa entre clase y clase, si el instrumento se desafina mucho, la práctica durante esos días suena bastante "fea").
Al contrario de lo que sucede con los pianos, los instrumentos de cuerda frotada necesitan algunos "accesorios" extra que hay que valorar también: la almohadilla, el atril, la resina, las cuerdas (si se rompen o se desgastan), cambiar de talla (en el caso de los alumnos más pequeños es habitual necesitar un cambio casi cada año cuando tienen entre 3-7 años, y quizás cambiar cada dos años cuando tienen entre 7-12 años, aproximadamente hasta alcanzar el tamaño 4/4)...
Así que elegir qué instrumento es el más adecuado no es tarea fácil. Aparte de la preferencia individual, también depende de factores como: el espacio disponible, el presupuesto para la compra de material...
Espero que estos comentarios sirvan de ayuda para aclarar algunos aspectos relacionados con los instrumentos musicales. Y si todavía quedan dudas, ¡escríbeme y pregunta! Estaré encantada de intentar ayudarte.
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